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Millones de años de evolución han hecho un trabajo increíble. El pie humano está perfectamente diseñado para estar de pie, caminar y correr.
Es sorprendente que los pies tengan todo tipo de formas y tamaños. Algunos han sido afectados por una vida entera usando zapatos convencionales, algunos son naturalmente más anchos y otros más delgados y largos. Estamos seguros de que encontrarás un par de Vivos que se adapten a ti.
Coloca un trozo de papel más grande que tu pie contra la pared. Asegúrate de que la pared esté plana y, si hay algún zócalo, que también esté plano.
Párate sobre el papel con el talón contra la pared. Asegúrate de que el suelo sea duro y que el papel no se deslice por ningún espacio entre el suelo y la pared/zócalo.
Marca en el papel hasta donde llega tu dedo más largo con el lápiz. Recuerda no meter el lápiz debajo del dedo, ya que quieres una medida máxima precisa.
Mida la distancia desde el extremo del papel hasta la línea del dedo del pie con una regla o una cinta métrica.
Repite con el otro pie, pueden ser diferentes – confía en nosotros en esto – y luego usa la medida más larga.
Utilice nuestras tablas de conversión a continuación para calcular su ajuste recomendado.
Esto muestra cómo un zapato quedaría ajustado. Sigue siendo un ajuste correcto, pero con menos espacio alrededor y en la parte delantera de la puntera.
Esta es la forma del ajuste recomendado de Vivos. Recuerda, puede que no sea tu ajuste preferido.
Si prefieres un ajuste más amplio o crees que tienes los pies más anchos de lo normal, podrías considerar elegir una talla más.
